“La victoria y el fracaso son dos imposibles, y hay que recibirlos con idéntica serenidad y con saludable punto de desdén”. Rudyard Kipling.
James Magnussen se convirtió en los trials australianos de clasificación olímpica en el nadador que más rápido ha conseguido con un bañador textil parar el cronómetro en la prueba de los 100 metros libres: 47.10.
O se pone las pilas César Cielo o parece que este australiano tiene todas las papeletas para sustituir a Alain Bernaird en el oro olímpico.
Aquí tenéis el video de la prueba, merece la pena verlo:
¡¡¡James Roberts le coge descaradamente el rebufo en la vuelta!!!Se ve que Magnussen prefirió pegarse a la calle 3 en vez de a la 5, que en teoría era más "peligrosa". Cielo, concéntrate en el 50...
ResponderEliminarDavid.