Historia de una Pancarta: Motivación

"Esta historia es la historia de una pancarta, de una ilusión, de un sueño de niño". J.C.M.

A continuación os remito la historia de un nadador Máster anónimo:

Junio de 2.010, Campeonato de Andalucía Master de Verano en Motril.

"Carlos y Laura 7 y 5 años respectivamente estaban emocionados ese día, su madre les había prometido que iban a hacer algo realmente chulo para darle una sorpresa a su padre, un padre al que últimamente veían muy poco por trabajo, por problemas y por la mala racha que estaba pasando gracias a una depre o a su mala cabeza, eso ya da igual.

Un sorpresón habían decidido hacer una pancarta animando al nadador de la familia y sin que el lo supiese se plantarían en Motril con la ayuda de los abuelos paternos para animar a papa.

La pancarta la terminaron a las 2 de la mañana porque tenían que pintarla los niños, con ayuda de su madre claro, pero no lo pudieron hacer hasta que su padre se marchase a competir ya que el se iba un día antes.

Comentarios de los niños hacen que esta historia sea muy especial, ¡mama hoy es el día más feliz de mi vida! mientras pintaban la pancarta, decía Carlos.

El abuelo llego muy temprano tenían que llegar antes de las 11h que era la hora prevista según el timing para el 200 braza, y la verdad no tenían ni idea de cómo llegar a la piscina.

Laura y Carlos se subieron en el coche del abuelo dispuestos a darle una sorpresa mayúscula a su padre, ilusionados, nerviosos, Laura mareada como es costumbre pero feliz porque llevaban algo que habían hecho con todo el cariño del mundo para animar a papa.

Llevaban una pancarta que decía mucho en pocas palabras, una pancarta que daba una lección para la persona más importante de sus vidas, la que estaba pasando un momento difícil y a la que tanto echaban de menos.

El viaje no fue muy largo, curiosamente el abuelo casi no se perdió y encontraron la piscina relativamente pronto.

Ya estaban los nadadores en la cámara de salida del 200 braza, la excursión almeriense entraba por las gradas, colocaron su sorpresa rápidamente en la grada y emocionados gritaron a su padre, marido e hijo para animarle en su prueba fuerte, tenia muchas posibilidades de ganar la serie.

Y no pudo ser, ni la fuerza de esa pancarta pudo empujar al primer puesto a papa, los niños y menos los abuelos entienden de categorías ni historias solo saben que salen 8 nadadores, se tiran al agua y el que gana es el primero que toca la pared.

Pero bueno lo importante era la sorpresa tan bonita que le habían dado, lo importante era participar y ver a papa como nadaba.

Pasaron las pruebas los niños se fueron a jugar por las gradas, luego a la cafetería, desaparecieron del mapa, ahora tocaba los 200 espalda no había muchas posibilidades en esa prueba y el padre le dijo a su mujer que no le dijese nada a los enanos, total no tenia mucho que hacer en esta ocasión.

La prueba comenzó y los niños ni se enteraron, pero poco a poco papa empezó a tirar y tirar ya sin presión porque sabía que sus hijos no lo estaban mirando, los gritos de sus compañeros de equipo llegaron a oírlos Carlos y Laura, corriendo fueron donde estaba su madre porque papa estaba ganando la serie, ellos con su pancarta gritaban al igual que abuelos, compañeros del club, mama etc…….papa ganó la serie, y eso es lo que ellos vieron, sin importar categoría ni historias, ellos consiguieron con su cariño que papa nadase muy rápido.

Para un master como yo ese fue el día más feliz de mi vida porque la cara que yo les vi a mis hijos al salir del agua de orgullo por ese padre, la cara de mis padres, de mi mujer y de mis compañeros cuando vieron a mis hijos abrazados a mi fue realmente alucinante.

Soy padre y marido orgulloso de mi gente, soy nadador master, me ilusiona nadar, me fascina el cloro, me gusta ganar como a todos, pero lo que más me gusta es tener una familia como la que tengo, unos compañeros tan locos como yo todo el día dando virajes.

Un Master Anónimo"